Los aceites vegetales vuelven a estar de actualidad. Y con razón: su eficacia está demostrada desde hace siglos por usos ancestrales. Hoy en día, su calidad está estrictamente controlada.
Esto significa que tenemos acceso a verdaderos tesoros y que podemos confiar realmente en su composición. Así es fácil elegir el aceite vegetal adecuado para un uso concreto, o por un olor, sabor o textura particulares.
Diferencia entre un Aceite Vegetal y un Macerado Oleoso
Un aceite vegetal se elabora a partir de grasas extraídas de las semillas de una planta. Algunos ejemplos son los aceites vegetales de: Albaricoque, Jojoba, Aguacate, Comino negro, Argán, Almendra dulce, Rosa mosqueta y Onagra.
El macerado oleoso es un método de extracción de los principios activos de una planta por maceración en un aceite vegetal neutro. Generalmente se trata de aceite de Girasol, para que pueda absorber el mayor número posible de moléculas activas.
Algunos ejemplos son los macerados de: Zanahoria, Hipérico, Árnica y Caléndula.
Cómo reconocer un Aceite Vegetal o Macerado Oleoso de calidad
Para preservar los principios activos naturales que contiene, el aceite debe extraerse exclusivamente por medios mecánicos a baja temperatura: es lo que se conoce como «prensado en frío».
El aceite no debe someterse a ningún tratamiento antes ni después del prensado. En este caso se dice que es «virgen».
El aceite debe ser ecológico para evitar residuos de pesticidas que puedan alterar su calidad.
El aceite debe conservarse protegido del aire, el calor y la luz.
Su durabilidad depende esencialmente de su composición en ácidos grasos.
Los aceites vegetales ricos en ácidos grasos esenciales son más sensibles a la oxidación. Por ello, no pueden conservarse más de 6 meses, mientras que un aceite vegetal compuesto casi exclusivamente de ácidos grasos saturados, como el aceite vegetal de Coco, es poco sensible a la oxidación.
Aceite Vegetal y Aceite Esencial
El aceite vegetal es un extracto lipídico de una planta oleaginosa, es decir, una planta cuyas semillas, frutos y nueces contienen lípidos.
En cambio, un aceite esencial se obtiene por destilación de una planta aromática. Está mucho más concentrado en principios activos, pero no es graso.
El aceite esencial requiere precauciones especiales, como la dilución en un aceite vegetal, con el que se mezcla muy bien, favoreciendo así la absorción de los aceites esenciales en la piel.
Lo ideal es combinar las propiedades de los aceites esenciales con las de los aceites vegetales, a fin de crear una sinergia bien equilibrada y específica para una acción cosmética o de salud concreta.
Los aceites vegetales son excelentes bases para los aceites esenciales, pero también son muy útiles por sí solos. Por ejemplo, para nutrir y proteger la piel o como complemento alimenticio. En este último caso, añádelos a tus ensaladas o al final de la cocción para no alterar sus virtudes por sobrecalentamiento.
Para elegirlos, fíjate bien en su contenido en ácidos grasos esenciales y vitaminas. Esto te proporcionará una idea de sus propiedades cicatrizantes (como la Caléndula), antiinflamatorias (como el de Árnica), o antienvejecimiento (como la Onagra).
Beneficios específicos de los Aceites Vegetales más populares
Los aceites vegetales son valiosos aliados para tu salud. Cada uno posee propiedades únicas que responden a necesidades específicas.
Un estudio científico publicado en 2019, exploró los beneficios de algunos aceites vegetales:
● Almendra: rico en ácidos oleico, linoleico, palmítico, esteárico y vitamina E. Este aceite favorece la epitelización y se aplica principalmente en pieles secas.
● Aguacate: con ácidos oleico, palmítico, linoleico y vitaminas A, D y E. El aceite de Aguacate ayuda a regenerar el epitelio, el tejido que recubre la superficie externa de las mucosas y las cavidades internas del organismo.
● Arándano: con ácidos oleico, linoleico, palmítico y vitamina E. Este aceite vegetal presenta actividad antimicrobiana, antiinflamatoria y antioxidante.
● Jojoba: rico en ácidos gadoleico, erúcico, oleico y vitamina E. El aceite vegetal de jojoba acelera el cierre de las heridas actuando sobre los fibroblastos y los queratinocitos, y estimula la síntesis de colágeno de tipo I en los fibroblastos.
Estos aceites vegetales ofrecen una serie de beneficios que pueden incorporarse a una rutina personalizada para el cuidado de la piel.
La elección del aceite vegetal debe estar en sintonía con tus necesidades individuales, para una experiencia del cuidado de la piel auténtica y eficaz.
Precauciones de Empleo
En general, los aceites vegetales pueden ser utilizados por toda la familia. Especialmente los aceites más neutros, como el de Almendras dulces o el de hueso de Albaricoque.
Cuidado, sin embargo, con el aceite vegetal de Rosa mosqueta, por ejemplo, que no siempre es bien tolerado por las pieles sensibles.
Cuando vayas a usar un aceite vegetal por primera vez, es mejor que pruebes antes una cantidad muy pequeña en el pliegue del codo.
*No todos los aceites vegetales son aptos para el consumo. Infórmate antes.
Lectura complementaria:
Aceites Vegetales: Fuente de Salud y Belleza
Si deseas incorporar, de forma inteligente y segura, los aceites esenciales y vegetales y otros productos naturales a tu rutina diaria de belleza y salud,
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