Para los niños que padecen Trastorno por Déficit de Atención, asociado o no a la Hiperactividad (TDAH), el AE de Vetiver puede utilizarse como un complemento eficaz para reducir los síntomas.
Tres síntomas característicos
El síndrome del TDAH se caracteriza por la asociación de 3 síntomas:
● El primero, central, es la dificultad del niño para mantener su atención, tanto en el cole («siempre en la luna»), como durante los juegos, para organizar su tiempo y realizar las tareas rutinarias.
● La impulsividad: el niño responde antes de su turno, corta la palabra, interrumpe las conversaciones.
● Y la posible dificultad para sentarse en una silla sin removerse, así como una hiperactividad motora, que se hace menos visible con la edad si es que ha existido.
El TDAH suele incluir otros trastornos: sueño interrumpido, dificultades de aprendizaje (discalculia, disortografía, etc.), ansiedad, adicciones (tabaco, alcohol, videojuegos…); y en la adolescencia (entre los 11 y los 19 años), dependencia afectiva, con, al mismo tiempo, la irresistible necesidad de distanciarse de los padres, e incluso fases depresivas.
Múltiples causas
La prevalencia del TDAH es del 3 al 5% de los niños. Comienza muy pronto en la infancia y a menudo persiste en la adolescencia e incluso en la edad adulta.
Las causas son múltiples, genéticas y epigenéticas: alteración de las relaciones tempranas madre-hijo, depresión materna posparto, dificultades educativas, imposición educativa, etc.
Las lesiones cerebrales encontradas son: las de la corteza orbitofrontal, lo que provoca una desinhibición de las conductas sociales y una pérdida de autocontrol; y las de la corteza dorsolateral, que son la causa de una falta de organización, de planificación, de atención y de memoria de trabajo.
El valor terapéutico del aceite esencial de Vetiver
El AE de Vetiver (Chrysopogon zizanoides, antes Vetiveria zizanioides), administrado cada día durante 30 días mediante inhalación profunda (3 veces seguidas), mostró buenos resultados en un estudio clínico realizado por el Dr. Friedmann (EEUU) en niños de 6 a 14 años.
Durante el estudio se observó una reducción de los síntomas del TDAH y un aumento de la actividad cerebral por electroencefalografía. Por el contrario, no se observó ningún efecto con el aceite esencial de Lavanda.
Advertencia
La información presentada en este artículo no constituye una recomendación terapéutica y no sustituye la consulta a un profesional de la salud.
No es adecuado para niños menores de 6 años, ni para mujeres embarazadas o en periodo de lactancia.
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